Con gol de Lucas Janson, de penal, el fortín triunfó por la mínima sobre River. El conjunto del Cacique Medina fue superior y mereció ganar por más. ¿Le alcanzará para afrontar la revancha? El millonario nunca se sintió cómodo y jamás pudo desplegar su juego. Rodrigo Aliendro salió lesionado.
Si hablamos de merecimientos hay que decir que Vélez mereció ganar por dos y hasta tres goles de diferencia. El equipo de Alexander Medina tuvo una gran intensidad durante los 90 minutos de juego, le cortó todos los circuitos a su rival y fue el gran ganador de la noche. Pero el 1-0 con gol de Lucas Janson refleja poco para tanto esfuerzo realizado y la próxima semana, en el Monumental, se disputará la revancha.
La llave de octavos de final de la Copa Libertadores ofreció un partido entretenido con muchas situaciones de gol. Vélez lo supo sacar adelante gracias a un gol de penal que llegó al minuto 15 luego de una infracción de Héctor Martínez que, en su afán por despejar el balón, se llevó puesto a Janson. Vélez, con el debut de Walter Bou y con Diego Godín alentando desde la platea y esperando por encontrar su mejor puesta física, salió decidido a presionar para ahogar a su rival y no dejarlo pensar. El plan de juego le salió perfecto al Cacique Medina ya que River no se sintió cómodo y vio como sus circuitos de juego se cortaban.
El millonario trató de abastecer a Enzo Fernández que siempre buscó encarar, pero al volante le faltó un socio en la creación. Con Nicolás De la Cruz lesionado, ni José Paradela como tampoco Ezequiel Barco se erigieron como compañeros para generar fútbol. Dentro de este panorama Julián Álvarez tuvo que bajar para buscar la pelota.
El dúo de mitad de cancha compuesto por Luca Orellano y Nicolás Garayalde siempre llevó las de ganar. Con el resultado a su favor el local se retrasó unos metros y apostó por contras veloces, que no pudieron ser definidas por errores o apresuramientos en el pase final. El ingreso de Abel Osorio le aportó más dinamismo al juego del fortín. Lucas Pratto tuvo opciones para aumentar y el mismo Osorio falló dos veces. En la primera Franco Armani le ganó el duelo casi en la línea y para la segunda el arquero volvió a taparle el gol luego de una habilitación de Pratto.
River se fue diluyendo con el correr de los minutos y Juan Fernando Quintero no gravitó. Vélez pudo aumentar la diferencia, pero entre el juez de línea y el VAR le anularon un nuevo gol a Janson. Ya en tiempo de descuento Osorio tuvo una nueva oportunidad con un desborde por la izquierda, aunque su remate pegó en el travesaño.
En el aire quedó la sensación que Vélez mereció más y que River la sacó muy barata. Habrá que esperar una semana para conocer si el 1-0 sirvió para avanzar de ronda o el millonario, con el empuje de su gente, puede dar vuelta la historia para clasificar a los cuartos de final.