Finalmente, llegó el día que los directores técnicos estaban esperando. Luego de la Asamblea General Anual que se celebró en Doha, La International Football Association Board (IFAB) confirmó que la lista de jugadores para el Mundial de Qatar será de 26, otorgándoles tres lugares más a la cantidad inicial.
Además, aprobó la opción de hacer cinco cambios de forma permanente a partir de la próxima temporada 2022-2023 en las competiciones de máximo nivel y debatió sobre posibles alternativas al fuera de juego y el uso de últimos avances tecnológicos para apoyar a los árbitros.
En su 136ª asamblea general anual (AGM, por sus siglas en inglés), celebrada en Doha (Catar), el IFAB ratificó los cambios y las aclaraciones de la edición de 2022/23 de las Reglas de Juego, que entrarán en vigor el 1 de julio de 2022.
En la AGM, presidida por Gianni Infantino, presidente de la FIFA, y que ha contado con la presencia de representantes de este organismo, de las federaciones de fútbol de Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia, Gales y del propio IFAB, se abordaron igualmente los ensayos relativos a las sustituciones por conmoción cerebral que se siguen llevando a cabo, los posibles cambios en la regla del fuera de juego y los últimos avances tecnológicos en materia de asistencia a los árbitros.
Por lo que respecta a la “Regla 3. Los jugadores”, y tras la petición de la FIFA en mayo de 2020 de velar por el bienestar de los futbolistas durante la pandemia mundial, el IFAB introdujo una modificación transitoria por la cual las competiciones nacionales e internacionales de máximo nivel disponían desde entonces de la opción de permitir a los equipos hacer uso de un máximo de cinco sustituciones; dicha modificación se prorrogó en varias ocasiones.
En la reunión de hoy, el IFAB aceptó las recomendaciones de la AGM y la reunión de los paneles consultivos futbolístico y técnico (FAP-TAP), con un claro apoyo de toda la comunidad futbolística, para que esta opción se introduzca de forma permanente en las Reglas de Juego 2022/23. Se confirmó la restricción actual de tres oportunidades de sustitución (más el descanso).
Además, los miembros decidieron aumentar de 12 a 15 el número máximo de suplentes que consten en la convocatoria de los partidos, siempre que así lo decida el organizador de la competición.
Los miembros recibieron información actualizada sobre los primeros resultados de los ensayos mundiales con sustituciones adicionales permanentes por conmoción cerebral. Aunque los ensayos contaron con la participación de más de 140 competiciones, la AGM respaldó la decisión de la reunión de trabajo anual de ampliar el periodo de pruebas hasta agosto de 2023 con el fin de recopilar más datos en los que sustentar científicamente la decisión. Se volvieron a plantear las sustituciones temporales por conmoción cerebral, pero los miembros coincidieron en que los ensayos deben continuar y centrarse en retirar de forma permanente del terreno de juego a cualquier futbolista que haya sufrido una conmoción cerebral o que se sospeche que este sea el caso para garantizar que no siga participando en el partido en cuestión. Asimismo, se acordó que es necesaria una formación complementaria para garantizar que los protocolos en los ensayos se apliquen correctamente.
La FIFA informó a la AGM sobre innovaciones futuras que permitirían a más competiciones acceder a la tecnología de árbitros asistentes de vídeo (VAR y VAR “simplificado”), probada en más de 100 partidos, así como sobre los resultados positivos de los primeros ensayos de sistemas que ayudarían a los equipos arbitrales de vídeo a tomar decisiones con mayor agilidad y precisión ante posibles fueras de juego (la llamada «tecnología semiautomatizada para la detección del fuera de juego»). Se está considerando asimismo una solución de apoyo con vídeo con vistas a posibles ensayos.
Se trataron asimismo otros ensayos, como la explicación de ciertas decisiones de los árbitros durante un partido, un cálculo potencialmente más justo del tiempo de juego, y los saques de banda con el pie. La AGM dejó claro que estas pruebas y cualquier otra requieren autorización y serán supervisadas por el IFAB y por la FIFA.
