Didier Lamkel Zé, jugador del Royal Amberes, llegó a su club con la casaca del Anderlecht. Forcejeó con la gente de seguridad. Luego pidió disculpas por su actitud en las redes.
No fue el método más ortodoxo, pero supo llamar la atención de su protesta. Se trata del futbolista camerunés Didier Lamkel Zé, que desde el mes de octubre que no juega en el Royal Amberes de Bélgica, y a toda costa quiere que lo vendan. Incluso hay un equipo que quiere contar con sus servicios, el Panathinaikos de Grecia. Al no tener una respuesta para que se produzca su pase, hoy fue al entrenamiento con la camiseta del Anderlecht, uno de los eternos oponentes de su club.
Desde hace más de dos meses el director técnico de su equipo, el croata Ivan Leko, no lo tiene en cuenta. Como el mercado de pases de invierno en Europa se abrió, el africano no encontró mejor manera de efectuar su reclamo. Se puso la camiseta de color violeta y, cuando llegó a las instalaciones de su club, el personal de seguridad no lo dejó ingresar. Es común que en los clubes no se pueda acceder con camisetas de otras entidades.
Didier, no conforme con la negativa de su acceso, forcejeó con los custodios quienes lograron impedir que entrara. Las imágenes surrealistas fueron captadas por un fotógrafo que estuvo en el ingreso.
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Ya el lunes Lamkel Zé avisó en su cuenta de Instagram: “Es simple, quiero ir a Grecia. He dado mi consentimiento. No jueguen con mi carrera”. Fue a entrenar y advirtió que volvería con la camiseta del Anderlecht. Sus compañeros lo tomaron en chiste, pero él no bromeó…
Si bien cumplió con su palabra, el tema fue un escándalo y no le quedó otra que pedir perdón en la misma red social donde expresó su descontento. “Quiero disculparme con el club y la afición de Amberes, son unos aficionados magníficos que siempre me han apoyado. Reaccioné así porque mi cabeza estaba en otro lugar. Tengo muchas ganas de disculparme. No me olvido ni de mis compañeros, ni del vestuario, ni del cuerpo técnico que me ha apoyado desde mi llegada. Estoy disponible para el club si el entrenador me necesita”, sostuvo.
La liga belga es liderada por el Brujas con 39 puntos. La pimienta que tuvo la controversia desatada por Lamkel Zé, es que el Anderlecht está cuarto con 32 unidades y a solo una se ubica el Antwerp…