Era una referente del Barrio 31 y había estado al frente del reclamo por la falta de agua en la zona.
Murió por coronavirus Ramona Medina, delegada de La Garganta Poderosa, una de las voces que más fuerte se escuchaba en el Barrio 31. Era insulinodependiente, estaba internada y había reclamado por la falta de agua en la zona. Fue hospitalizada la semana pasada, y poco después se confirmó que su marido, sus hijas, sus cuñados y una sobrina, dieron positivo y están internados.
La Garganta Poderosa anunció la noticia por Twitter. «Nos mataron a Ramona. Apretando los dientes, golpeando el teclado, mordiendo la rabia y escupiendo lágrimas, nos toca escribir ahora esta mierda, para gritar todo eso que Ramona ya gritó. No vamos a parar, ¡hasta que paguen los responsables! NO PODEMOS MÁS. #JusticiaPorRamona», publicó el medio, que se muestra la dura realidad que se vive en el Barrio 31.
Integraba el grupo de riesgo de COVID-19, ya que era insulinodependiente. Al igual que su marido trabajaban como gestores de trámites para personas con discapacidad, coordinando sus traslados a escuelas y centros de terapia, pero habían dejado de hacerlo por la pandemia. No tenían agua en su casa.
El foco de contagios en el barrio debajo de la Autopista y otros vulnerables de la Ciudad es una preocupación para los gobiernos porteño y nacional, que realizan testeos masivos casa por casa en esas zonas.
Fuente: TN.
