La autovía colapsó por segundo día consecutivo a raíz de la reapertura de varias actividades en Capital Federal. Hay importantes demoras, especialmente a la altura de Dock Sud.
En Capital Federal se flexibilizó la cuarentena decretada para contener el avance del coronavirus y se reflejó especialmente en el caudal del tránsito en los distintos accesos. Como ocurrió este lunes, la autopista La Plata-Buenos Aires colapsó de vehículos y nuevamente se registran más de 5 kilómetros de congestión.
Este martes se reubicaron los puestos de control y ahora están instalados en Dock Sud. Hasta el lunes, el embudo se daba a la altura de la Usina del Arte, mano a CABA. Si bien mejora la circulación porque hay siete carriles habilitados en ese sector de la autovía y no hay cruces de camiones, los controles son más ágiles, aunque por momentos hay un embotellamiento completo.
Con este corrimiento de los controles 3 kilómetros al sur -ahora efectuado por Gendarmería- los retrasos se redujeron de 50 a 20 minutos. En tanto, las verificaciones son aleatorias: no frenan a todos los rodados.
Como se viene efectuando desde el inicio del aislamiento por la pandemia de COVID-19, se realiza un operativo para constatar la circulación solo de trabajadores de los rubros considerados esenciales.
En tanto, desde AUBASA precisaron que las reducciones de calzada se dan a la altura del kilómetro 30 en ambos sentidos de circulación.
Además, está reducido el carril rápido en la autopista, sentido a la Ruta 2. Se da desde el kilómetro 31,5 hasta el 32 del ramal Gutiérrez por otros controles vehiculares en esa zona.
